Las novedades sobre las dos especies humanas más cercanas a la nuestra, los neandertales y los denisovanos, han sido objeto de gran interés en los últimos años. A medida que avanzamos en nuestro conocimiento sobre la evolución humana, se han descubierto constantes intercambios genéticos entre estas dos especies y los humanos modernos. Estos hallazgos nos permiten comprender mejor nuestro pasado y cómo hemos evolucionado como especie.
Los neandertales y los denisovanos son dos especies humanas extintas que coexistieron con los humanos modernos hace miles de años. Los neandertales vivieron en Europa y Asia, mientras que los denisovanos se encontraban en Asia oriental. Aunque se extinguieron hace más o menos 40,000 años, su legado genético sigue vivo en los humanos modernos.
Uno de los descubrimientos más sorprendentes es que los humanos modernos tienen entre un 1% y un 4% de ADN neandertal en su genoma. Este hallazgo fue posible gracias a la secuenciación del genoma neandertal en 2010, que demostró que hubo cruces entre neandertales y humanos modernos cuando ambas especies coexistían en Europa. Esto significa que los humanos modernos tienen una pequeña parte de neandertal en su ADN, lo que nos hace más cercanos a ellos de lo que se pensaba anteriormente.
Pero los intercambios genéticos no se limitaron solo a los neandertales. En 2010, se descubrió que los humanos modernos también tienen un pequeño porcentaje de ADN denisovano en su genoma. Este hallazgo se debió a la secuenciación del genoma de un dedo de denisovano encontrado en una cueva en Siberia. Se cree que los humanos modernos se cruzaron con los denisovanos en Asia oriental, lo que explica por qué solo los asiáticos y los nativos americanos tienen ADN denisovano en su genoma.
Pero lo que es aún más fascinante es que los humanos modernos también tienen una pequeña cantidad de ADN que no se puede rastrear ni a neandertales ni a denisovanos. Esto sugiere que hubo cruces con otras especies humanas desconocidas en nuestro pasado evolutivo. Aunque aún no se han identificado, se están realizando investigaciones para descubrir quiénes podrían ser estos ancestros desconocidos.
Estos intercambios genéticos entre especies humanas nos han dado una visión más completa de nuestra evolución. Anteriormente, se creía que los humanos modernos eran la única especie humana en la Tierra y que nuestra evolución era lineal. Sin embargo, estos descubrimientos han demostrado que nuestra evolución fue mucho más compleja y que hubo interacciones entre diferentes especies humanas.
Además, estos intercambios genéticos también han tenido un impacto en nuestra biología. Se ha descubierto que el ADN neandertal y denisovano en nuestro genoma está asociado con rasgos físicos y enfermedades en los humanos modernos. Por ejemplo, se ha encontrado que el ADN neandertal está relacionado con la cuero y el cabello más claros, así como con un mayor riesgo de enfermedades autoinmunes. Estos hallazgos nos ayudan a comprender mejor nuestra biología y cómo hemos evolucionado en diferentes regiones del mundo.
Pero estos intercambios genéticos también nos han dado una perspectiva más humana de los neandertales y los denisovanos. Anteriormente, se les consideraba como criaturas primitivas y a salvo evolucionadas que los humanos modernos. Sin embargo, los descubrimientos genéticos han demostrado que estas especies también tenían una complejidad biológica y cultural similar a