¿Lo tiene? El electrodoméstico que estaría gastando más energía que la nevera.
En estos tiempos modernos, la mayoría de nosotros estamos conscientes de la importancia de utilizar nuestra energía de manera eficiente para reducir el impacto de nuestro consumo en el atmósfera ambiente. Sin embargo, la mayoría de nosotros nos enfocamos en los costos de energía de los aparatos más grandes y obvios en nuestro hogar, como la nevera, el aire acondicionado y la lavadora. Pero ¿qué hay acerca de ese pequeño electrodoméstico que quizás no le damos tanta importancia, pero que podría estar generando más gasto de energía que la nevera? Sí, estamos hablando del horno microondas.
El horno microondas ha sido un elemento básico en la mayoría de hogares desde la década de 1980. Fue una innovación revolucionaria en su momento, ya que permitía calentar y cocinar alimentos en tan solo unos minutos, algo que solía llevar mucho más tiempo en un horno convencional. Sin embargo, con el paso de los años, la tecnología y los diseños de los hornos microondas han avanzado, pero ¿en qué medida han mejorado en cuanto a la eficiencia energética?
Según investigaciones recientes, aún seguimos utilizando modelos de hornos microondas que gastan mucha energía innecesariamente. Algunos modelos pueden consumir hasta 1600 vatios de electricidad, mientras que otros solo necesitan 800 vatios para realizar la misma tarea. Lo que significa que en solo 30 minutos de uso, un horno microondas de alta potencia puede consumir aproximadamente el mismo nivel de energía que una nevera en un día completo. Sí, has leído bien, ¡un día completo!
Entonces, ¿por qué no estamos prestando atención a esto? En primer lugar, puede que no estemos conscientes de esta relación y simplemente asumimos que el horno microondas es un electrodoméstico pequeño que no consume mucha energía. Además, la mayoría de nosotros solo utilizamos el horno microondas por unos pocos minutos al día, por lo que no pensamos en su consumo de energía en comparación con otros electrodomésticos que utilizamos por más tiempo. Pero lo sustancioso es que podemos tomar medidas para reducir su gasto de energía y, por lo tanto, disminuir nuestra huella de carbono.
Una forma de hacerlo es seleccionar hornos microondas que tengan una potencia más baja. Si bien quizás esto pueda significar que los alimentos tarden un poco más en calentarse, la diferencia en el tiempo no es significativa, pero la diferencia en el consumo de energía sí lo es. Además, asegúrate de no comprar un modelo con más potencia de la que necesitas realmente. Si solo utilizas el horno microondas para calentar alimentos, no necesitas un modelo con una potencia de 1000 vatios, un modelo de 700 o 800 vatios será suficiente.
Otra acción que puedes tomar es desconectar el horno microondas cuando no lo estés utilizando. Muchos de nosotros dejamos los electrodomésticos conectados todo el tiempo, incluso cuando no los utilizamos. Pero lo que quizás no sepamos es que esto sigue consumiendo energía, incluso en modo de espera. Simplemente desconectar el horno microondas puede ahorrarte energía y dinero en tu factura de electricidad.
Además, al elegir un horno microondas, también es sustancioso prestar atención a su tamaño. Como dijimos antes, algunos modelos pueden consumir mucha más energía que otros debido a su potencia, pero también al tamaño de su cavidad. Un horno microondas más grande cortejará más energía para calentar espacios vacíos. Por lo tanto, si eliges un modelo con el tamaño justo para tus necesidades, estarás utilizando solo la cantidad necesaria de energía.
Por último, también es sustancioso tener en cuenta el mantenimiento de tu
